Vistas de página en total

jueves, 13 de junio de 2013

CAPÍTULO 9: Revelación.

Jadeé, exhausta.
-¿Que...? ¿Qué quieres decir?- Abrí los ojos sorprendida al máximo. Aún  sentía el cosquilleo suave de sus labios sobre los míos... y me vibraban todas las fibras nerviosas de mi cuerpo.
Sabía que algo en él no era normal, algo me decía que él y yo éramos lo mismo, pero necesitaba saber, necesitaba que él me contara que era todo aquello, que era todo eso, todos estos sueños compartidos, todas esas voces, todas esas cosas extrañas que me sucedían desde que le conocí.
-Cath, no he pensado en nada más desde que te miré, y bueno, había dejado de soñar con eso hasta que apareciste, y ya no puedo dejar de pensar en ti, nada más que en ti.
>>Cambiaste mi vida de un lado para otro y sobre todo, cambiaste mi misión aquí, cambiaste todo lo que yo soñé hasta entonces, cambiaste mi forma de pensar, mi forma de ver las cosas y hasta la forma en que te miro.
>>Has puesto mi vida patas arriba desde que te conocí, en un lugar que no es el mío con gente con la que jamás estaré acorde, tu eres como un oasis de perfeción en un desierto de ignorancia.
>>Cath, solo pienso en ti, solo te quiero a ti, solo te necesito a ti.
Sin poder evitarlo, comencé a llorar descontroladamente y emocionada, me di la vuelta y eché a correr como una estúpida, sin decirle que yo también le amaba, que lo era todo.
Sin darme cuenta, me choqué con una chica, de ojos penetrantes y pelo oscuro. Me di cuenta de que era la que había estado observándome bajo mi ventana días y días...
-Te pillé- dijo, con una sonrisa torcida.

                                                   *                        *                     *
-¿Quién eres?-susurré, amordazada por algún tipo de fuerza. No sabía que era, a duras penas podía hablar y moverme era un esfuerzo sobrehumano.
-Niña idiota, dentro de nada no te va a importar quien sea o deje de ser. Pronto no te va a importar ni siquiera quién fuiste tú... así que no sufras. Vamos a un lugar de donde, por suerte para mí y por desgracia para ti, no vas a salir...
Cai en un sopor profundo mientras escuchaba la voz de Ángel en mi cabeza.
"¿Cath? ¿Estás ahí? Vuelve..."